La Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (PPA) anticipó vigilancia especial de las condiciones en que operará el próximo relleno sanitario de Othón P. Blanco ante el riesgo de contaminación en los cuerpos lagunares cercanos.
El titular de la PPA, Miguel Ángel Nadal Novelo, afirmó que será estricta la supervisión del área que abarcará el nuevo sitio de disposición y planta de tratamiento de la basura.
Como se sabe, la capacidad del relleno sanitario de Chetumal ha sido superado, por lo cual la empresa Intransiso, responsable del manejo de los desechos, fue obligada a establecer un nuevo predio para su depósito.
El terreno, como se acordó con las autoridades municipales, se ubicado en las inmediaciones del poblado de Xul-Ha, cercano a la laguna del mismo nombre y a la conocida como Milagros.
Miguel Nadal Novelo dejó en claro que la empresa Intransiso no solo tendrá que atender los lineamientos legales respecto al funcionamiento de la planta sino también al saneamiento del basurero de Chetumal, donde se siguen depositando los residuos sólidos.
“La empresa tendrá dos responsabilidades, la primera será instalar el nuevo sitio con las características que especifica la Norma y la segunda será el saneamiento del basurero de Chetumal, porque tendrá que ser cerrado”, dijo.
El Procurador Ambiental resaltó que los trabajos de saneamiento son necesarios porque, de no realizarse, podría suceder una contingencia sanitaria.
Hay que destacar que ejidatarios de Calderitas y habitantes de colonias cercanas consideran que al menos 400 familias podrían enfrentar problemas de salud por las condiciones de insalubridad que imperan en el basurero chetumaleño.
Enfatizó que no se permitirá que la empresa concesionaria para el manejo de la basura en Othón P. Blanco violente la ley ambiental ni que atente contra el entorno.
Diario la verdad.
